Educar a través de una formación basada en principios que abordan el aspecto humano para ser y vivir el cambio.
Para gozar de la Paz Mundial y el avance, pienso que primero tenemos que empezar por liberarnos de los conflictos que existen en el interior de cada individuo. Para que los países continúen evolucionando es indispensable crear una nueva norma en el currículo educativo para el desarrollo y avance del ser humano, sin olvidarnos de aquellos que se encuentran en vías de pleno desarrollo. Solo cuando conectamos desde un espacio de amor e integridad para ayudar a las personas podremos hacerles ver que existe una manera y un camino para llegar a ese futuro que deseamos, pero necesitamos actualizarnos y aprender para adquirir nuevos conocimientos y, otras herramientas para poderlo lograrlo.
Un 80% de los factores que nos limitan y hacen que nos resistamos se encuentran en nuestro interior, en nuestras cualidades personales, habilidades, hábitos o se encuentran en nuestra organización. Solo un 20% de los factores limitantes se encuentran en el exterior en forma de competidores, mercados, gobiernos u otras organizaciones.
Podemos lograr grandes cambios, a través de una formación que combine ciencia y espiritualidad, basada en recientes estudios en neurociencia que documentan cómo el ser humano puede aprovechar sus capacidades para vivir en un estado de armonía y despertar su creatividad, y lograr un desarrollo exponencial en cada aspecto de la vida tanto a nivel personal como profesional.
Como miembro para el consejo de la iniciativa global de emprendedores en Estados Unidos, he tenido la gran oportunidad recientemente de participar en el Foro como líder de pensamiento en Las Naciones Unidas en Nueva York, donde he compartido mi historia personal y cómo he logrado superar barreras en momentos de gran adversidad para iniciar un proyecto de emprendeduría sostenible para ayudar a las personas a transformar sus vidas a través de un programa de desarrollo personal inspirándolas hacia un cambio de actitud, auto mejora y alto rendimiento.
Pienso que no solo es este el mejor momento en la historia, esta es quizás la etapa que nos ofrece más seguridad y estabilidad.
Aunque estoy segura de que más de uno se preguntará, entonces, ¿por qué parece que el mundo se está cayendo a pedazos? Las guerras, la violencia de hogar, el terrorismo, agresividad en el entorno escolar, el cambio climatológico, las drogas, el cáncer…. Esto es algo que se vive en cada rincón del planeta. ¿Pero no ha sido siempre así? ¿No es cierto que el mundo siempre ha sido una lucha continua para aquellos que creen y viven en lucha todo el tiempo?
Deberíamos estar agradecidos por todo el cambio desde los años 60 e incluso mucho antes. He podido observar grandes cambios por poner un ejemplo en zonas rurales en un país como India durante mi colaboración en proyectos de filantropía. Cómo las personas que viven en la pobreza tienen acceso a agua limpia, electricidad y la eliminación de residuos. Cómo comunidades tribales de personas a las que uno temía incluso acercarse reciben el afecto, educación y recursos para desarrollar su potencial y transmitir el mensaje entre otros colectivos y comunidades para el desarrollo. Estas son cosas que habrían sido inimaginables hace 100 años atrás. Entonces, ¿por qué estamos todos tan consumidos en la tragedia del mundo que nos rodea? ¿Por qué estamos alimentando nosotros mismos tantos pensamientos negativos?
En vez de apreciar todo lo que tenemos, estamos sentados delante de nuestros televisores o computadoras, o rodeados de personas que en vez de creer en la “posibilidad” siempre hablan de lo “im-posible” y se basan en aquello a lo que ellos llaman lógica y creencias limitantes dejándose absorber por la negatividad, estamos dejándonos llevar por experiencias de un pasado para continuar experimentando el fracaso en vez de aprender y avanzar.
¿Cómo podemos cambiar esto? ¿Cómo podemos lograr que las personas no estén viviendo dominadas y controladas por el miedo? ¿Cómo podemos darle un giro a esos pensamientos que nos quitan el poder?
Tenemos que comenzar como si se tratará de iniciar un programa de ejercicios para mantenernos físicamente en forma. En este caso, aprender a reconocer quiénes somos, administrar correctamente nuestros pensamientos, saber qué es lo que queremos y descubrir nuestra visión y todo nuestro potencial para poder tomar acción.
La acción hacia la positividad es dura cuando el ciclo de noticias de 24 horas nos inunda con imágenes constantes de horror. Es por eso que debemos volver a reeducar a las personas para hacer frente a la avalancha del miedo. Eso no quiere decir que el sufrimiento de cualquier persona debe pasar desapercibido, pero no debemos permitir alimentar a nuestros miedos para que estos acaben controlándonos. Siempre tenemos una opción desde donde escoger.
Pasamos tiempo poniendo nuestra atención en todo aquello que no funciona o que no deseamos como resultados en nuestras vidas, y en toda la miseria que ocurre en el día a día en el planeta, mientras nos olvidamos de toda la belleza que este mundo nos ofrece.
Para combatir la negatividad, necesitamos reciclar nuestras mentes a pensar de una manera diferente – y crear el equilibrio en nuestras vidas para apreciar la verdadera maravilla de este mundo en que vivimos.
He creado un movimiento en España y que poco a poco está logrando un impacto internacional, llamado Transformando Vidas®. Es una combinación de espiritualidad y teorías científicamente probadas, que ayudan a los individuos y a los emprendedores a desarrollar, mediante el entrenamiento y otras técnicas, una programación mental óptima para la mejora de su vida y de su rendimiento.
Estamos capacitados para desarrollar una mentalidad consciente, a influir positivamente en nuestros equipos, comunidades, familias, negocios, equipos de gobierno o a cualquier persona en un contexto de amor, armonía y de gozo.
Como emprendedora, creo en un futuro con jóvenes líderes capaces de formar y crear empresas y dirigir desde un nivel jerárquico distinto al que tradicionalmente han utilizado la corporación o la pequeña empresa. Es fundamental cambiar la norma, y crear principios de liderazgo basados en la consciencia y la conexión efectiva para que el planeta prospere.
Pienso que podemos cooperar para vivir en un mundo más feliz y más sano. Soy consciente de que unidos podemos traer consciencia y crear el legado para educar a las próximas generaciones de líderes sanos, creativos y fuertes.
Quiero ayudar a las personas sin importar en donde y en qué condición se encuentran en este momento en sus vidas a tener la posibilidad de cambiar sus vidas y vivir en mundo mejor.
Cuando descubrimos nuestro potencial podemos ser libres y salvarnos del conflicto que supone ser dominado por el entorno. Es momento de aprender a tomar contacto con nuestro poder interior y confiar en que el cambio es posible. Cada vez que cambiamos nosotros, el mundo cambia.
Kanta Motwani
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